viernes, 26 de noviembre de 2010

ANTES DEL CLÁSICO

Esta jornada se juega el partidazo, el enfrentamiento que todos esperamos, los dos transatlánticos del fútbol español se ven las caras.

Por desgracia, tenían razón los que decían el año pasado que la Liga española se parece cada vez más a la escocesa por la diferencia entre los dos primeros y el resto de equipos. Como ejemplo, al final de la temporada pasada en ambas ligas hubo la misma diferencia entre el campeón y el tercero: 18 puntos. A estas alturas de temporada ya estamos en una situación similar, si al principio de la Liga las buenas perspectivas de Valencia, Sevilla, Atlético o Villarreal junto con ciertas dudas levantadas por Barça y Madrid hacían soñar con una temporada más competida, todo quedó en un espejismo. Nadie puede aguantar el ritmo de las dos constelaciones de cracks más potentes del Planeta Fútbol.

Así las cosas, el momento de enfrentarse, siempre emocionante, este año parece casi definitivo (aunque en el fútbol nunca puedan descartarse hundimientos en un torneo tan largo como es la Liga española). Con dos entrenadores singulares, cada uno a la cabeza de una forma de proceder completamente diferente, tanto futbolística como personalmente, vuelve a ser una confrontación de estilos. La ventaja merengue es que si en los dos años anteriores era el enfrentamiento del estilo del Barça contra la improvisación del Madrid, este año ambos poseen un proceder reconocible y propio. El Barça continúa haciendo del balón su mejor amigo, su camino y su obsesión. Mientras la pegada es la obsesión y el camino blanco. Su fútbol de este año es una sucesión casi mecánica de acciones rápidas y precisas, con una mentalidad de hierro y un entrenador dispuesto a abroncar públicamente a quien no actúe como él desea (incluidos los entrenadores rivales).

El gran valor de Mou para fichar por el Real Madrid este año fue haber eliminado al Barça en la anterior campaña, una eliminación que parece haberle dado cierta imagen de bestia negra azulgrana no se hasta que punto fundada. No le va a valer al Madrid hacer lo que el Inter logró el año pasado en el Camp Nou. Esa imagen de antifútbol, de equipo cerrado atrás, no vale para el Madrid. Además, perdió ese partido, también perdió en el partido de la liguilla. Él lo sabe y lo está practicando. Sabe que lo importante era funcionar atrás y ser muy eléctricos y rápidos arriba, tiene jugadores de los mejores del mundo para conseguirlo y es casi natural que el equipo sea atractivo y efectivo.

Son dos equipos espectaculares que casi van a decidir la Liga en dos partidos, el lunes el primero de ellos, la pinta del encuentro es espectacular, tendrá todas las perspectivas del fútbol: espectáculo, goles, grandes jugadores, lucha táctica, fútbol físico, polémica... la fiesta está servida.

sábado, 20 de noviembre de 2010

UN ESCENARIO DESCONOCIDO PARA ESPAÑA

La selección española da una sensación de resaca postmundialista que asusta un poco. Los dos equipos potentes a los que nos hemos enfrentado después de levantar la Copa, Argentina y Portugal, nos han endosado cuatro goles. De acuerdo en que esto no nos quita lo bailado, son nada más que amistosos y el gol de Iniesta sigue en nuestras retinas como demostración fehaciente de nuestro logro futbolístico más glorioso.

Aunque lo que refleja la historia son los grandes torneos, estos amistosos generan un ambiente y una tendencia que suele acabar teniendo sus reflejos cuando hay algo en juego. No será lo mismo encontrarse por ejemplo con Portugal en la próxima Eurocopa después de los cuatro goles del otro día, por no hablar de la opinión que de La Roja quedó en Argentina después del 4 a 1. Pero no solo ellos, cualquier otra selección con cierto potencial a la que nos enfrentemos va a sentirse capacitada para repetir las gestas de Argentina y Portugal, y no todos los días se gana a un Campeón del Mundo.

La España de Del Bosque debe entender que desde el 11 de Julio no es un equipo más, sino el equipo a batir, con lo que esto significa, que cada partido sea más importante para nuestro rival que para nosotros. Toca descubrir si nuestro seleccionador está a la altura y sabe transmitir esa ambición a los jugadores, ese respeto al logro conseguido el pasado verano, esa necesidad de mantener la excelencia, de representar la superioridad de un estilo. Sin todo eso, el brillo de la Copa del Mundo se desvanecerá pronto.

Finalicemos con una reflexión sencilla: pongámonos en el lugar de un aficionado al fútbol de otro país, si ve que al Campeón del Mundo le meten cuatro en un partido, tal vez pensaría que es casualidad, pero si la siguiente vez que juega contra un rival potente le cae otra goleada ¿Qué pensaría de ese Campeón?... Inquietante ¿verdad?

lunes, 8 de noviembre de 2010

Mourinho y los mortales

Mou sabe algo que los demás desconocemos, cada día que pasa estoy más convencido. Crea un personaje que es capaz de mantener continuamente y desde su atalaya de soberbia con su pose de superioridad da clases a periodistas, entrenadores y jugadores rivales.

Ahora parece que está dispuesto a cargarse uno de los mitos recientes del fútbol español: las rotaciones. A no ser que esto cambie (pero no tiene pinta), el Madrid va a disputar tres competiciones con esperanzas de victoria usando un once tipo muy marcado y cambios escasos y repetitivos. La alineación titular del Madrid de este año tiene muchas semejanzas con la que tan bien le funcionó el pasado año en el Inter. Centrales sobrios (este año tiene dos compatriotas de su máxima confianza, Pepe y Carvalho), laterales ofensivos (de Maicon - Chivu a Ramos - Marcelo), dos medios centros trabajadores y con buen manejo para el pase fácil (de Cambiasso - Motta a Khedira - Alonso), un mediapunta que es la clave del equipo (de Sneijder a Özil) y tres delanteros goleadores con la velocidad como principal cualidad que pueden intercambiar sus posiciones con facilidad (de Pandev - Eto'o - Milito a Di María - Cristiano - Higuaín). Lo que no tenía aquí, lo ha fichado. Otra de las cosas que Mourinho sabe y los demás desconocemos es cómo convencer a los presidentes de que le fichen lo que él diga. Mou manda, y al que obedezca se lo recompensa con títulos. Lo ha demostrado en Oporto, Chelsea e Inter, le han dado lo que pedía y él ha devuelto triunfos.

Sabe ser polémico y hacerse ver, con lo que logra sacar de los nervios a los rivales y quitar presión a sus jugadores. La mayor parte de las portadas sobre el Madrid de los periódicos deportivos versan sobre el técnico, algo inaudito. Sabe como hacer que se hable de lo que a él le interese en cada momento. Eleva a la máxima expresión lo que se suele llamar "dominar los medios".

También sabe lanzar en los medios mensajes a sus propios jugadores. Los suplentes deben preferir que su técnico hable mal de ellos a que no les nombre. Benzema y Pedro León, a los que ha castigado duramente en público, son sin duda los suplentes favoritos del técnico luso. Sabe mantenerlos "calientes". Sin embargo, jugadores como Lass, que parece de poca confianza, no le han merecido apenas alguna mención. Sabe controlar la plantilla y tratar a cada jugador para ganarles para la causa común. No obstante, en algún partido el equipo ha dado muestras de problemas físicos que hacen pensar en la posible conveniencia de establecer rotaciones. No parece que el ex traductor de Robson esté muy por la labor, tal vez piense que le valen los partidos de Copa o haga cambios en la Champions, una vez clasificados, o quizás prefiera tener mentalmente activos a un número reducido de jugadores de alta confianza, a una especie de cuerpo de élite, y hacer los cambios solo cuando sea imprescindible. Lo veremos, porque parece que es el único posible talón de Aquiles que se vislumbra en el futuro merengue.

La temporada es larga y habrá diferentes fases para todos, pero ya parece claro que Madrid y Barça estarán arriba y la Liga volverán a decidirla pequeños detalles, esos que parece que Mourinho domina... siempre que no menosprecie a la brillante tropa de Guardiola.